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viernes, 20 de marzo de 2015

Columnas de diferentes diarios, dedicadas a caso MVS-Aristegui

El tema es analizado por columnistas en periódicos y portales.
Veracruz-Aristegui-s3
Veracruz-Aristegui-s3 (Cuartoscuro
Columnas publicadas en diarios impresos y digitales del caso MVS-Aristegui:

Juan Villoro/Reforma

“La interperie”

El despido de Carmen Aristegui de MVS representa la pérdida de un espacio decisivo del periodismo mexicano. Ese trabajo, con reportajes de investigación, verificación de datos, corresponsales en provincia y el extranjero, requiere de un apoyo empresarial dispuesto a beneficiarse del alto rating de la conductora y la credibilidad de que goza en amplios sectores de la población.



Francisco Garfias/Excélsior

“Soy yo o la censura…”

El lunes 16 de marzo fue día feriado. Puente por el natalicio de Benito Juárez. El equipo de Carmen Aristegui llegó a las cinco y media de la mañana a trabajar. No era un día ordinario. Reinaba la incertidumbre. Las cosas no andaban bien con la empresa.

El diferendo con MVS por el tema Méxicoleaks había ocasionado no sólo el despido de Daniel Lizárraga e Irving Huerta, integrantes de la Unidad de Investigaciones Especiales, sino también la exigencia de la influyente conductora para que los reinstalaran.

 Diego Petersen/Sin embargo

“Medios y conductores, la crisis del modelo”

Más allá de afectos y desafectos, la problema entre Carmen Aristegui y MVS es una radiografía ampliada de un modelo en crisis. Esto es, casos como éste pueden repetirse todos los días en todos los rincones del país, pero cuando se trata de una conductora del prestigio y audiencia de Aristegui, de una empresa del tamaño y éxito de MVS y en un contexto donde el que la conductora encabezó la investigación que tiene el jaque a la Presidencia de la República, las contradicciones y fisuras del modelo se hacen evidentes.

Alebrto Aziz Nassif/El Universal

“Una batalla por la libertad”

¿Están amenazadas nuestras libertades democráticas? El golpe a Carmen Aristegui me confirma que los avances en materia de libertad de expresión son vulnerables. Es cierto que ahora se pueden hacer caricaturas del presidente, porque a veces sólo nos queda el humor. También es cierto que las redes sociales son espacios de libertad. Pero, vivimos con el temor de que los micrófonos libres se cierren de un día para otro, como pasó con Carmen.

Reducir el conflicto Aristegui-MVS a un litigio entre particulares es perder de vista la perspectiva de que una concesión es un bien público. ¿Dónde termina la responsabilidad pública de un concesionario que tiene que respetar los derechos de las audiencias? ¿Dónde empieza la libertad empresarial cuando se maneja un bien público y no cualquier mercancía? En las redes sociales domina, y con razón, la narrativa de que el despido de Carmen de MVS es una penalización porque se atrevió a desnudar al poder presidencial en sus conflictos de interés. Han pasado meses desde que nos enteramos de la famosa casa blanca, a Carmen le quitaron el micrófono, pero el hecho quedó como el emblema de una forma de ejercer el poder hoy: la alianza entre gobierno y negocios, recursos públicos y beneficios privados.

Adrián López Ortiz/Sin embargo

“¿Quién contratará a Carmen Aristegui?”

Tengo la fortuna de dirigir un periódico con 42 años de antigüedad e independencia en México. Junto con mi equipo, soy responsable de su línea editorial y de los resultados del negocio ante el Consejo de Administración. Eso me permite tener un punto de vista un tanto distinto sobre el affaire Aristegui.

Toda proporción guardada y, me disculpo de antemano por la ambición, pero creo poder ponerme un poco en los zapatos de ambas partes del conflicto.

Katia D’Artigues/El Universal

“Aristegui habla, MVS le responde”

“Sospecho (que sí)”, fue la única palabra que dijo Carmen Aristegui cuando alguien por redes sociales le preguntó ayer en su streaming por internet si ella creía que su salida de MVS se debía al reportaje de la Casa Blanca. En otro momento ligó su salida a algo que necesariamente, según ella, tenía “anuencia del máximo poder presidencial”.

Un reportaje, el de la Casa Blanca, que ella aceptó que tiene aún una historia que falta por contar. No se transmitió por MVS por un “dilema” que enfrentó, y en el que su equipo y ella tuvieron que usar la imaginación para sacar la información completa de otra manera… ¿O sea, no se lo dejaron pasar? ¿Ella decidió en ese momento no transmitirlo ahí para conservar el espacio?

Dura en su discurso. Además del “vendaval autoritario” también llamó a esto una señal de “echeverrismo”.

Salvador Camarena/El Financiero
“El mito del error”
Qué dice la empresa qué ocurrió en este caso. Alega que nunca fue informada de que el equipo de la periodista y MexicoLeaks establecieron una alianza, y que eso, las alianzas, las “decide la administración de la empresa, no sus conductores y colaboradores” (ESTO SERÍA “EL ERROR”), y que “el uso de nuestra marca, sin autorización expresa de sus propietarios, constituye no sólo un agravio y una ofensa, sino un engaño a la sociedad, pues implica un muy lamentable abuso de confianza”. (ESTO ÚLTIMO SERÍA A JUICIO DE LA EMPRESA EL TAMAÑO DEL ERROR).
Fuente : Aristeguinoticias.

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