MÉXICO, D.F., (apro).- Antes de concretarse su expulsión de Noruega, Adán Cortés Salas, el estudiante mexicano que interrumpió la ceremonia de entrega del premio Nobel de la Paz, concedió una entrevista a la cadena de televisión estadunidense CNN en la que confesó que teme regresar a México porque, subrayó, “sé cómo se resuelven las cosas”.
Adán
“No voy a regresar –dijo– a un lugar donde sé que mi propia seguridad corre riesgo. No quiero ser un estudiante más que desaparezca o que aparezca muerto y que el gobierno diga que fue el crimen organizado”.
El estudiante de Relaciones Internacionales de la UNAM reiteró que no se arrepiente de haber protestado en la ceremonia del Nobel de la Paz, donde, con la bandera de México ensangrentada, pidió a Malala Yousafzai, una de las galardonadas, no olvidarse de México.
Su motivación, señaló, fue la situación de crisis que vive el país, en particular por la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa.
“Estoy cansado de tantas injusticias que hemos vivido en México”, enfatizó.
Adán comentó que ingresó a la ceremonia de entrega del Nobel de la Paz, en el Ayuntamiento de Oslo, por la puerta de invitados y nadie se lo impidió.
“Si alguien me hubiera pedido identificación, no hubiera mentido. Pero nadie me detuvo. Pensé que esta era mi oportunidad de alzar la voz por todos quienes sufren en México”, dijo al tiempo que insistió que nunca tuvo la intención de hacer daño.
“Sé que no era la manera adecuada y que fue desesperada, pero así es como estamos en México”, abundó.
Cortés Salas agradeció la atención que ha recibido en todo el mundo por su hazaña pero, enfatizó, “prefiero que la atención esté sobre la realidad mexicana”.
El mexicano fue deportado la mañana de este lunes de Noruega hacia la Ciudad de México, luego de que las autoridades rechazaran su solicitud de asilo político al considerar que carecía de fundamento. Adán argumentó que no quería ser deportado a su país por temor a que el gobierno mexicano tomara represalias en su contra por su protesta que fue vista en todo el mundo.
El universitario permaneció el fin de semana retenido en el centro para extranjeros de Trandum, al norte de Oslo, a la espera de que se concretara su expulsión y se resolviera un proceso judicial en su contra.
Y es que el viernes pasado un tribunal había determinado su puesta en libertad temporal, con obligación de presentarse diariamente en el juzgado hasta que fuera expulsado, sin embargo la decisión fue aplazada porque la policía recurrió a una corte de segunda instancia.
La Policía quería que Cortés Salas fuera encarcelado de forma preventiva ante el riesgo de fuga y por violar las leyes de inmigración.
Tras permanecer detenido casi un día, fue trasladado al centro de internamiento para extranjeros, luego que la policía noruega cerró el caso por la vía penal con una multa de 15 mil coronas noruegas (mil 693 euros, o dos mil 98 dólares) por alteración del orden y por entrar de forma ilegal en el Ayuntamiento de Oslo. La multa fue pagada de forma anónima.
Fuente : Proceso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario