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| Un vendedor ambulante camina junto a un anuncio del festival Hell & Heaven. Foto: AP / Eduardo Verdugo |
Los uniformados llegaron esta tarde al lugar, luego de que en las redes sociales surgió una convocatoria para realizar una “megamarcha” mañana a las 13:00 horas frente al lugar que desde ayer fue clausurado por personal de Protección Civil estatal y resguardado por unos 80 policías municipales.
Además, unos 300 jóvenes de escuelas como la Universidad del Valle de México, El Liceo y la Universidad Autónoma del Estado de México plantel Texcoco, realizaron un mitin frente al palacio municipal para protestar por la cancelación del festival y en apoyo a la alcaldesa, Delfina Gómez Álvarez.
Por la mañana, la presidenta municipal perteneciente al partido Movimiento Ciudadano, acudió a la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM) citada por el ministerio público como testigo de una denuncia relacionada con la organización del evento.
Al salir, informó que previo a la cancelación de ayer, hubo al menos siete reuniones con personal de la Dirección General de Protección Civil del estado, la Secretaría de Seguridad Ciudadana y otras autoridades estatales, pero en ninguna se hicieron señalamientos sobre las condiciones de seguridad del foro.
La funcionaria dijo que ella no podía hacer más por el evento y que dependería de las autoridades estatales y los empresarios organizadores. Negó que la cancelación tenga tintes políticos y aseguró que si no se hace el concierto serán los jóvenes y no su administración, los que perderán.
Exigen metal en redes sociales
Luego de que ayer la Secretaría de Gobernación confirmó la decisión del gobernador Eruviel Ávila de cancelar el festival por no cumplir con las medidas de seguridad, este viernes a lo largo del día se mantuvo la incertidumbre en las redes sociales.
Los usuarios crearon el hashtag #TodosSomosHH con el que pidieron a Eruviel Ávila permitir que el festival siguiera adelante. En Twitter los organizadores solicitaron ejercer presión para que el funcionario los recibiera en su oficina: “Sr.Gobernador @eruviel_avila estamos en su sala de espera para que nos reciba. @hhfest #HHCoronaMetalFest #TodosSomosHH”, escribieron. Según la cuenta de Twitter, no hubo ninguna reunión.
Las críticas no esperaron @Camp_Art escribió: “#HellAndHeaven #Texcoco#pudreteEruviel porque te preocupa mas la seguridad en un festival, que el narcotráfico y secuestros en todo el estado” y @astrid_mx dijo: “Oye @eruviel_avila mejor ocúpate de los feminicidios, secuestros y delincuencia en tu entidad y no de cancelar conciertos”.
En internet también se promovió la firma de una carta en la que acusaban al gobernador de “persecución de las identidades juveniles” y de intervenir en la autonomía municipal de manera autoritaria. Según el formato cargado en la página Change.org, hacia las 22:00 horas ya tenía cerca de cuatro mil firmas.
El festival Hell and Heaven incluiría la presencia de bandas clásicas de heavy metal y hard rock, entre ellas Guns and Roses, Kiss, Rob Zombie, Korn y Testament. Además, contaría con otras actividades y exhibiciones para los asistentes.
Más de cinco mdd, la pérdida
El fundador del festival del metal 2014, Juan Carlos Guerrero, estimó que la cancelación de dicho espectáculo provocaría pérdidas estimadas en cinco millones de dólares.
En una entrevista en Radio Fórmula, Castillo se dijo extrañado de que el gobierno del Estado de México haya cancelado súbitamente el festival. Argumentó que, permanentemente, las autoridades estatales se mantuvieron en pláticas con los organizadores del festival.
El empresario precisó que la totalidad de los grupos contratados habían confirmado su asistencia. La página de internet oficial del evento informó que se contrató a mil 500 guardias de seguridad para mantener el orden del espectáculo.
También se mencionó que lo que estaba cancelado era la sede en Texcoco, pero no el festival; incluso, se habló de la posibilidad de buscar otras sedes, por ejemplo, en Querétaro, Hidalgo y el Distrito Federal.
Sin embargo, hasta las 22:00 horas no había ninguna información sobre una nueva sede.
Fuente : Proceso.
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