Decenas de personas se reunieron el sábado en las afueras del
McDonald’s de Miami Beach donde el pintor de graffiti Israel Hernández
murió el martes por la mañana después que la policía lo agarró pintando
el edificio abandonado y le disparó con un Taser.
Los amigos y
partidarios marcaron el abandonado edificio en la intersección de la
Calle 71 y la Avenida Collins con sus propias palabras escritas con
tizas de colores: “No más brutalidad policial” y “RIP Reefa”, el apodo
de Hernández, y pidieron que se haga responsable a la Policía por sus
acciones.
El Departamento de Cumplimiento de la Ley de la Florida
estuvo de acuerdo el viernes en revisar la
investigación del
Departamento de Policía de Miami Beach, algo que fue bienvenido por la
familia Hernández-Llach y sus abogados.
“Desde la muerte de Israel, la familia ha pedido una investigación
independiente de la muerte de Israel y las acciones del Departamento de
Policía de Miami Beach”, dijo el sábado por la tarde el abogado Todd
McPharlin a los presentes.
“Ayer nos enteramos que el Departamento
de Cumplimiento de la Ley de la Florida se involucrará en la
investigación. Vemos esto como el primer paso en recibir las respuestas
que necesita y merece la familia Hernández y esta comunidad”, agregó.
El
agente que disparó el Taser contra Hernández-Llach –Jorge Mercado, un
veterano de 13 años del Departamento de Policía de Miami Beach– fue
colocado el jueves en licencia con goce de sueldo.
La Oficina del Forense de Miami-Dade y la Fiscalía Estatal de Miami-Dade también revisan el caso.
Fuente : Elnuevoherald
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