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| Memorial de agravios contra periodistas mexicanos en el Ángel de la Independencia. Foto: Germán Canseco |
Con la representación de 18 mil publicaciones, 15 mil sitios web y más de 3 mil empresas de 120 países, el organismo internacional manifestó su preocupación también porque el estado de Veracruz acumula 50% de los homicidios contra periodistas cometidos en México desde 2011.
En un comunicado fechado en Paris, Francia y Darmstadt, Alemania, WAN-IFRA lamentó de igual forma que la Procuraduría General de Justicia de Veracruz no le haya dado peso en sus indagatorias al trabajo periodístico del reportero de la sección policiaca de los diarios Notisur y Liberal del Sur, cuyo cadáver fue encontrado el martes 11 en Las Choapas, seis días después de su secuestro.
“Resulta aberrante que la procuraduría estatal deseche la profesión de Gregorio Jiménez en la investigación, ya que existen elementos que indican que su trabajo periodístico pudo haber sido el móvil de la agresión”, dijo Rodrigo Bonilla gerente regional para América Latina de WAN-IFRA.
Peor aún es que “a dos semanas del secuestro de Jiménez, la Fiscalía Especial de la Procuraduría General de la República no ha atraído la investigación del caso, lo que parece indicar que también descarta la profesión de Jiménez como móvil del crimen”, apunta Bonilla.
En el manifiesto, la organización destacó que “durante la administración del gobernador Javier Duarte de Ochoa, han sido asesinados por lo menos ocho periodistas en Veracruz”. El asunto es más grave si se considera que “el estado de 9 millones de habitantes concentra así el 50% de los asesinatos de periodistas en México desde el inicio de 2011”.
Sobre el caso específico de Jiménez de la Cruz, WAN-IFRA resalta que “si bien las autoridades veracruzanas han capturado a seis personas que presuntamente planearon y cometieron el crimen, la procuraduría estatal responsable de la investigación decidió desechar la profesión de Jiménez como posible móvil del asesinato, privilegiando la pista de una venganza personal”.
Lo anterior resulta más grave considerando que según información recabada por WAN-IFRA, “Jiménez habría llevado a cabo investigaciones periodísticas sobre una serie de secuestros y desapariciones en el municipio y en consecuencia habría recibido amenazas en octubre de 2013”.
Ante la falta de atracción del caso por parte de la FEADLE, Rodrigo Bonilla declaró que “este caso revela que las instancias federales necesitan mecanismos que les permitan atraer los delitos contra la libertad de expresión de manera más expedita”, así como que se publique “de manera más extensa entre el medio periodístico la existencia de estas instancias y su modus operandi”.
El defensor también lamentó la tardía actuación del Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas de la Secretaría de Gobernación en el caso.
Bonilla recordó que desde febrero de 2013, tras una visita realizada por WAN-IFRA y el Instituto Internacional de Prensa (IPI) a México, se llegó a la conclusión de que Veracruz era “uno de los lugares más peligrosos para el ejercicio del periodismo en el mundo”, y que pese a ello funcionarios de alto nivel del gobierno estatal afirmaron que “la liberta de de expresión está 100% garantizada” en una reunión realizada con representantes de ambas agrupaciones.
Rodrigo Bonilla emplazó al gobernador Javier Duarte “a reconocer de una vez por todas la extrema gravedad del problema de la violencia contra periodistas en su estado y a tomar medidas eficaces para remediarlo”.
WAN-IFRA se sumó al reclamo de más organizaciones sociales e internacionales de periodistas “para que se esclarezca el homicidio de Jiménez y se garanticen las condiciones para un libre ejercicio del periodismo en Veracruz”.
Fuente : Proceso.
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