Foto: laverdadyucatan.com |
Esto con la finalidad de obligarlos a retomar las clases, las cuales fueron suspendidas en rechazo a la reforma educativa y en respaldo al paro nacional convocado por la CNTE.
Los docentes de la escuela Héroes de 1847 solicitaron apoyo a compañeros de comunidades cercanas, quienes arribaron al municipio y confrontaron a la alcaldesa. Mukul Borges intentó deslindarse de las
acusaciones asegurando que el encierro “fue por inciativa de los padres de familia que están hartos de los maestros”; sin embargo, todos los testimonios apuntan a la alcaldesa y sus empleados como los responsables de la privación de libertad en contra de los maestros.
Diego Rodríguez, uno de los maestros en paro, aseguró al Diario de Yucatán que los padres de familia respaldan la suspensión de clases. El viernes pasado tuvieron una reunión con ellos y les garantizaron reponer las clases perdidas y les explicaron cómo afecta la reforma su trabajo y las condiciones de la educación pública.
Sin embargo, los problemas comenzaron cuando Luis Ángel Salazar, enviado de la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado (SEGEY) intentó convencer a los padres de familia de que la reforma educativa es en beneficio de sus hijos; además de que fue aprobada bajo la vigilancia de 500 diputados 128 senadores. “La aprobaron porque son unos vendidos” reviraron los padres, quienes respaldarán a los maestros en el paro magisterial indefinido.
El delegado de la Comisión de Derechos Humanos del Estado (Codhey), Baltazar Xool May se reunió con los maestros encarcelados y los asesoró. Interpondrán una denuncia penal contra la alcaldesa por privación ilegal de la libertad.
Con información de La Jornada, El Diario de Yucatán e Impunemex
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