MÉXICO, D.F. (apro).- Pese al crecimiento de la economía mexicana
después de la crisis del 2009, los ingresos de los hogares mexicanos no
alcanzan a recuperarse; al contrario, la clase media, por ejemplo, ha
venido arrastrando un deterioro desde aquella recesión, de acuerdo al
Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Al dar a
conocer la Encuesta Nacional de los Ingresos y Gastos de los Hogares
(ENIGH), el Inegi reveló que el ingreso promedio corriente total se
ubicó en 38 mil 125 pesos trimestrales en 2012, lo que significó un
incremento de 1.5% respecto de los 37 mil 574 registrados en 2010.
Sin
embargo, los recursos de las familias mexicanas aún no logran alcanzar
aquellos niveles anteriores a la crisis de 2009 (año en que la economía
se desplomó 6.5%), cuando tenían ingresos promedio de 42 mil 865 pesos
trimestrales.
El crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) después del 2009 evolucionó de manera favorable, no así los ingresos familiares.
En
2010, el PIB tuvo una expansión de 5.5%; en 2011, 3.9%; en 2012, 4.2%.
No obstante, en este último año los hogares promedio de México lograron
vivir con 423 pesos diarios; mientras que en el 2008 la cantidad
ascendió a 476 pesos.
Pero el diablo está en los detalles. Si se
comparan los ingresos de las familias más pobres, con los de ingreso
medio y altos, la desigualdad de recursos dibuja un abismo.
De
acuerdo con el Inegi, los hogares ubicados en el decil I, es decir, los
más pobres del país, sobrevivieron con 77.7 pesos diarios en 2012. Lo
equivalente a un kilogramo de huevo, más un garrafón de agua y un
kilogramo de tortilla.
La “buena noticia” es que los ingresos de
este sector de la población fueron los que más crecieron entre 2010 y el
2012, a una tasa de 5.5%. En 2010, las familias ubicadas en el primer
decil sobrevivían con 73.7 pesos diarios, mientras que en 2008, antes de
la crisis, tenían disponibles 79.2 pesos.
Caso contrario es el
del decil V, los de recursos medios. Ellos sí vieron disminuidos sus
ingresos con la crisis y no han podido recuperarlos hasta el año pasado.
En el 2008, una familia de clase media contaba con 284.7 pesos diarios.
En 2012, los recursos cayeron a 265.7 pesos diarios. Hubo un desplome
de ingresos de 6.6% de la precrisis hasta el año pasado.
En
México, la punta más alta del abismo de recursos la marcan las familias
adineradas. Mientras que los más pobres sobreviven con 77.7 pesos
diarios y un hogar de la clase media con 265 pesos, una familia del
decil X, que es el más alto en recursos, tiene a su disposición mil 478
diarios. Más de cinco veces de lo que ingresa un hogar de media tabla.
Los
hogares del décimo decil aumentaron sus ingresos entre el periodo
2010-2012, ubicándolos en 133 mil pesos trimestrales. Sin embargo, la
cifra es corta comparada con el 2008, cuando antes de la recesión
económica sus recursos eran de 155 mil 525 pesos trimestrales.
De
los ingresos de las familias más ricas, el 19.9% lo ocupan en educación y
esparcimiento; el 19.7% en transporte y comunicaciones; el 14.4% en
alimentos, bebidas y tabacos.
Por su parte, los hogares de
recursos medios destinan el 35.5% de sus ingresos en alimentos, bebidas y
tabaco; un 16.7% en bebidas y telecomunicaciones; y un 10.4% en
educación y esparcimiento.
Mientras que el 46.4% de los 77.7 pesos
diarios de las familias más pobres se destinan principalmente a
alimentos, bebidas y tabaco; el 10.2% a vivienda y combustibles, en
tanto que el 9.8% al transporte y comunicaciones.
Con este cuadro,
el 30 % de los hogares (deciles VIII,IX, X) concentraron el 62.7 % de
los ingresos corrientes totales, mientras que el restante 70 % de los
hogares (del decil I al VII) obtuvieron solo el 37.3 % del ingreso.
Fuente : Proceso
No hay comentarios:
Publicar un comentario