La firma sueca busca mejorar las condiciones laborales y también evitar a las modelos anoréxicas.
Al
parecer los errores del CEO de Abercrombie & Fitch y la tragedia de
H & M en la fábrica de Bangladesh han marcado al mundo de la moda.
Johan Persson comentó en entrevista que para H & M, Bangladesh y la anorexia son temas importantes. |
Para entrar en contexto, Johan Persson, CEO de H & M acaba de firmar un acuerdo
de seguridad para apoyar y proteger a los trabajadores de la fábrica en
Bangladesh. El compromiso establece que las empresas deben pagar por la
renovación y reparación de sus instalaciones, con el fin de garantizar
que las fábricas sean más seguras. Además, en octubre del 2010 se
comprometieron a mejorar la calidad laboral de sus trabajadores,
incluyendo un aumento salarial y una petición al gobierno para aumentar
el salario mínimo, considerado el más bajo del mundo.
Como parte del compromiso social, la marca firmó un acuerdo llamado “Acuerdo de Fuego y Seguridad en la Construcción en Bangladesh”,
con esto, la firma sueca se compromete a destinar durante cinco años $
500.000 dólares anuales para mejorar la seguridad de la fábrica. H&M
colabora con proveedores de Bangladesh desde 1982 y tiene una oficina
de producción a tiempo completo en Dhaka desde 1986.
En una entrevista exclusiva para Metro World News y realizada por Elisabeth Braw, Persson
propone la colocación de una etiqueta a la ropa, en donde el cliente
pueda saber si la prenda que compró fue hecha en una fábrica segura.
Además, la firma eligió a una modelo de talla 44 para su nueva campaña “Conscious Collection”, la cual busca combatir el estereotipo de modelos súper delgadas y evitar enviar un mensaje anoréxico.
Elisabeth Braw: ¿La crisis económica ha perjudicado a H&M?
Johan Persson: – Cuando
el mercado de la ropa disminuye, eso no afecta. Pero al mismo tiempo,
pienso que más gente ha descubierto la marca en tiempos como éstos,
porque ha comenzado a cuestionar sus compras. Los clientes quieren un
buen look, de buena calidad, con un precio bajo y eso es lo que
ofrecemos.
EB: ¿Las marcas caras son una inspiración o una extravagancia?
JP:– Hay muchas que se van por el lado
del diseño y nosotros hemos colaborado con varios modistos de prestigio,
como Karl Lagerfeld o Viktor & Rolf. Pero cuando te fijas en el
aspecto calidad-precio, pienso que las marcas caras no siempre son muy
impresionantes. Tienen márgenes muy altos.
EB: Actualmente hay un gran debate sobre las modelos anoréxicas. ¿No debería H&M usar más modelos curvilíneas?
JP: – Aquí tenemos una enorme
responsabilidad. No creo que siempre hayamos sido buenos. Algunas de las
modelos que hemos tenido han sido demasiado flacas y eso no está bien.
Eso es algo en que estamos trabajando. Queremos mostrar la diversidad en
nuestra publicidad y no darle a la gente la impresión de que las
jóvenes tienen un look particular. En nuestra última campaña tuvimos una
modelo de senos grandes y ahora a Beyoncé, quien posee un poco más de
curvas. Creo que las modelos en nuestra publicidad deben tener un
aspecto sano. Hay quienes son demasiado delgadas y, obviamente, con muy
bajo peso, pero también hay las que son sólo delgadas y es con ellas con
las que debemos seguir trabajando, siempre y cuando se vean saludables.
EB: Hace poco una fábrica de ropa se
derrumbó y dejó un saldo de más de mil trabajadores muertos. Ahora
H&M, el mayor fabricante de ropa en Bangladesh, ha firmado un
acuerdo donde se compromete a ayudar a sus maquilas, ¿pero éstas serán
seguras?
JP: – El colapso de la fábrica fue un
hecho terrible, pero nuestro código de conducta prohíbe el uso de
maquilas en zonas residenciales, aunque hemos estado trabajando para
mejorar las condiciones en ese país durante mucho tiempo. Nunca puedes
estar 100% seguro, los accidentes en Suecia también ocurren. Tenemos
alrededor de 100 inspectores de tiempo completo, quienes visitan a
nuestros proveedores para asegurarse de que se están adhiriendo a
nuestro código de conducta a la hora de construir medidas de seguridad,
contra incendios, salarios, pago de horas extra y así sucesivamente.
EB: Si la ropa se hace en maquilas seguras, con un salario mínimo justo y con una etiqueta especial, ¿qué ventajas traería?
JP: – Sería lo mejor, ya que se
acabarían con muchas de las percepciones erróneas sobre que los precios
bajos significan malas condiciones para los trabajadores o que la labor
en sostenibilidad es deficiente.
EB: ¿Va a promover esta idea en otras empresas?
JP: – Me encantaría sentarme con otras
compañías y encontrar un modelo para esto. Pienso que vamos a tener este
tipo de comercio justo en un par de años. Pero es importante que el
país trabaje para sí mismo. No podemos sentarnos y ser sólo
espectadores.
Fuente : SDPnoticias
No hay comentarios:
Publicar un comentario