Tras la denuncia pública de los activistas Rubén Figueroa y el padre fray Tomás González, coordinador del albergue promigrante La 72, este domingo militares y policías federales, apoyados por cuerpos policiacos locales, se movilizaron en la zona.Apenas por la mañana, los activistas de La 72 recibieron dos amenazas por parte del crimen organizado que opera en Tenosique.
Los activistas han apoyado a centroamericanos que son víctimas del cobro de cuota y amenazas de muerte, lo que les ha ocasionado problemas con una célula del crimen organizado que opera en la región.
Hoy por la mañana llegó un joven a La 72 para informarles que “los mafiosos” le advirtieron que esta noche entrarían por todos los que habían denunciado y que ya los tenían bien ubicados, “que ya sabían por dónde entrar al albergue”.
Junto con Rubén Figuero, fray Tomás González acudiría esta mañana a la Procuraduría de Tabasco para interponer la demanda penal y pedir medidas de seguridad, “pero una de nuestras voluntarias me llamó y me dijo que de manera urgente me trasladara al albergue. Al llegar, una de las personas que denunció, me explicó que en las vías se había topado con gente que le dijo: “… lo que nos interesa es la cabeza del padre, que está al frente de todo esto; y de todos los que están hablando… Hoy mismo vamos por todos ellos al albergue…”.
Al tener ambos testimonios se dieron a la tarea de informar a todos los cuerpos de seguridad: Policía Federal Ministerial, PGJ, Policía Federal y el Ejército.
Alrededor de las 14:00 horas se desplegó un operativo en el que tres personas fueron detenidas, señaladas por los migrantes. Sin embargo, no capturaron a quienes los activistas consideran son los cabecillas principales, entre ellos al jefe que encabeza la banda que opera entre Tenosique y Coatzacoalcos.
“Esto por supuesto que nos pone en un mayor riesgo y en un mayor peligro”, dijo fray Tomás González.
Fuente : Proceso
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