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| El candidato del PAN a la alcaldía de Saltillo, Isidro López Villarreal. Foto: Vanguardia |
En 1928, Isidro, Carlos y Ricardo López Zertuche, abuelo y tíos del candidato panista, erigieron una fábrica de artículos laminados que años después se convirtió en un imperio industrial.
Actualmente, el Grupo Industrial Saltillo participa en diversas ciudades en las ramas de negocio automotriz, cerámica y electrodomésticos, así como en el sector agrícola y ferrocarrilero, y también comercializa gran variedad de artículos para mesa y cocina.
Isidro López Villarreal es hijo del fallecido Isidro López del Bosque, quien durante aproximadamente 40 años mantuvo el cacicazgo en la región por la vía empresarial.
Su tío, Rosendo Villarreal, se convirtió en el primer alcalde panista en esta ciudad, en 1990. Se gestión fue conocida por diferentes acciones conservadoras, entre ellas el intento de prohibir el uso de minifaldas o que las mujeres ya no salieran a la calle después de las 11 de la noche.
Manuel López Villarreal, quien fungió como alcalde de la capital coahuilense de 1997 a 1999, se distinguió por continuar con medidas conservadoras como las instrumentadas por su tío Rosendo, al prohibir la instalación de los llamados table dance. Cuando finalizaba su mandato prohibió incluso la presentación del show “Sólo para mujeres”, de moda en aquel entonces.
Isidro López Villarreal realizó toda su carrera en el sector empresarial y recientemente incursionó en la política. El virtual ganador de la contienda del domingo 7 fue presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra) y de otros organismos empresariales, y apenas en 2012 solicitó su registro como militante de Acción Nacional.
En entrevista con Apro, el empresario habla de sus planes para la alcaldía, entre los que destaca la coordinación con el gobierno federal para combatir al crimen organizado, así como una nueva estructura para reorganizar la tierra y la participación ciudadana.
“Entré a la política por lo que me ha enseñado mi padre, quien me dijo que nunca pierda la fe en que la humanidad puede ser cada vez mejor, y es una de las cosas que me tienen aquí”, dice.
Añade:
“Yo sí creo que la sociedad puede ser mejor, y si no creyera sería un sonso por estar aquí, pudiendo estar en una playa”.
De acuerdo con el abanderado del PAN, su programa para la alcaldía de saltillense incluye dos puntos básicos: “Punto número uno, la regularización de la tenencia de la tierra. En Saltillo hay más de 30 mil lotes, donde la población tiene más de 10 años viviendo en ellos. Incluso lo han pagado una y hasta dos veces y siguen sin ser los dueños. Creo que es un proyecto muy viable”, detalla.
El segundo proyecto, agrega, es crear centros de convivencia comunitaria donde los habitantes aprendan a invertir los recursos del municipio.
“Cada comunidad se va integrar por varias colonias, con un presupuesto que van a manejar esas mismas colonias. El centro comunitario va a tener que decidir dónde se va a invertir”, puntualiza.
Respecto del tema económico, admite que tiene mucha experiencia en las empresas globales, pero, desafortunadamente, dice, se ha perdido la visión de la economía local.
Según López Villarreal, en la economía actual se proporcionan muchos incentivos a las grandes empresas, pero que faltan estímulos para los pequeños negocios locales.
“Tenemos que darle también muchos incentivos y facilidades a las amas de casas que quieren poner una papelería y comercios, cómo mantenerles tarifas de luz y agua, y darles facilidades en los trámites y bajarles a las cargas administrativas”.
El panista asegura que la gente ya no quiere más impuestos y cargas impositivas que, apunta, se deben a la megadeuda autorizada por su contrincante, Fernando Donato de la Fuente.
“Él la aprobó cuando era presidente del Congreso, y no sólo eso, también se burló al firmar un acuerdo para que se mantuviera reservada la información durante varios años. Por todo eso dije: ya basta, tenemos que hacer algo”.
Subraya:
“A mi Saltillo me ha dado mucho. A través de las empresas que crearon mi padre y abuelo, y que generaron más de 10 mil empleos, he recibido dividendos y ahora tengo resuelto mi problema económico, no solo el mío sino de varias generaciones”.
López Villarreal afirma que se sintió comprometido a hacer algo que le dictaba su conciencia, a pesar de que sabía que iba prevalecer la guerra sucia, pues “me han dicho que soy narcotraficante, que tengo amantes y muchas cosas más”, sostiene.
De acuerdo con el panista, para combatir la inseguridad y la violencia los municipios tienen realmente poco que hacer, y en su caso –afirma– se plegará a los dictados de los gobiernos federal y estatal. “Los municipios tienen un papel primordialmente preventivo, vamos a trabajar mucho en ello”, añade.
Saltillo, detalla, sólo tiene 400 policías y existen muchos problemas para reclutar nuevos efectivos, así que “nosotros le vamos a dar mucha confianza a los policías y nuestro respaldo ante la delincuencia organizada, además de capacitación y mucha inteligencia para tomar acciones. Definitivamente creo que hay que dejar las reglas claras para mediano y largo plazos. Si no ponemos las reglas claras, vamos a sufrir el flagelo que estamos sufriendo.”
Remata:
“Les digo a esas personas que tienen las armas, que no se vale, que piensen en sus hijos, que esto no es correcto. Si lo vemos desde un punto de lo que es la misma naturaleza humana, no puede ser, no podemos abusar de la vida de ninguna persona.
“A las personas que están en este tipo de giros, ojalá los podamos convencer (de que dejen las armas). Yo soy un apasionado del convencimiento, creo que a través del convencimiento se logra más”.
Fuente : Proceso
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